Cómo dos argentinos lograron acelerar el crecimiento de plantas un 42% con una técnica innovadora

Sylvarum es el nombre de un ambicioso proyecto desarrollado por los emprendedores argentinos Manuel Sobrino y Guadalupe Murga, que ha revolucionado el cultivo de plantas al combinar técnicas avanzadas de hidroponia con electroestimulación. Su objetivo principal es acelerar el crecimiento de las plantas, aprovechando la capacidad de las mismas para responder a campos eléctricos y magnéticos. Esta innovación ha llevado a un incremento del 42% en la velocidad de crecimiento de las plantas, según el estudio más reciente.
La tecnología detrás de Sylvarum
El núcleo de Sylvarum es un enfoque innovador que integra hidroponia y electroestimulación. La hidroponia es un método de cultivo en el que las plantas crecen en soluciones acuosas enriquecidas con nutrientes, en lugar de tierra. Esta técnica ofrece un control preciso sobre los nutrientes y las condiciones de crecimiento. Los emprendedores han combinado este método con una técnica de electroestimulación que utiliza campos electromagnéticos para hackear el metabolismo de las plantas.
El concepto detrás de la electroestimulación es que las plantas poseen un sistema de comunicación eléctrico interno que regula su metabolismo. Sobrino y Murga descubrieron que este sistema puede ser influenciado por estímulos electromagnéticos externos. “Encontramos que podemos hackear este sistema con estímulos electromagnéticos y, de esta forma, influir en la composición química de las plantas para que crezcan un 42% más rápido”, explica Sobrino.
Reconocimientos y avances del proyecto
La propuesta de Sylvarum no pasó desapercibida. Ganaron el primer premio en la categoría “Idea Negocio” de la competencia Naves Federal 2023, organizada por el Banco Macro y el IAE Business School. Además, obtuvieron el primer lugar en el IB50K 2022, un concurso de planes de negocio de base tecnológica organizado por el Instituto Balseiro, la UNCuyo y la CNEA. Estos premios les brindaron financiamiento y formación especializada, fundamentales para avanzar en sus pruebas científicas y validar el proceso.
Sylvarum recibió una inversión inicial de US$ 20,000 y el apoyo de la Aceleradora Gridx, una compañía que impulsa empresas biotecnológicas. Actualmente, el proyecto cuenta con un equipo de doce personas y está incubado en la Universidad del Norte Santo Tomás de Aquino (Unsta) en Tucumán. “Tenemos un acuerdo con la universidad para usar sus laboratorios y, a cambio, apoyamos a estudiantes y los tomamos como pasantes”, señala Sobrino.
De la hidroponia a la electroestimulación
El camino hacia Sylvarum comenzó en 2016, cuando Sobrino regresó a Argentina después de una pasantía en un fondo de inversión en Londres. Empezó a explorar la hidroponia y construyó un pequeño módulo de cultivo en su casa, que luego expandió a un invernadero de gran escala. Esta experiencia inicial le permitió colaborar con empresas como Cencosud, proveyendo hojas verdes para sus cadenas de supermercados.
La colaboración con Facundo Garretón de Yvy Life Sciences, una empresa de producción de cannabis medicinal, impulsó a Sobrino a integrar tecnología en su proyecto. Fue entonces cuando se unió a Guadalupe Murga, una destacada estudiante de Ingeniería Biomédica, para desarrollar el sistema de electroestimulación que caracteriza a Sylvarum.
El proceso de validación y futuros desarrollos
En abril de 2022, Sylvarum comenzó a construir su laboratorio en la Unsta, donde realizan pruebas de electroestimulación en diversas variedades de plantas. El sistema que están validando utiliza electrodos que se introducen en el medio de crecimiento de las plantas, conectados a un generador de señales que emite la electroestimulación. Esto crea un campo electromagnético que influye directamente en la composición de las plantas.
El proyecto ha alcanzado el nivel 4 de TRL (nivel de madurez de la tecnología) y está en camino de pasar al nivel 5, que implica pruebas en condiciones menos controladas, como un invernadero. A futuro, Sylvarum espera llegar al nivel 9 de TRL, donde la tecnología estará lista para comercializarse. Los clientes potenciales son productores de agricultura en ambientes controlados, que buscan optimizar el rendimiento económico al aumentar la velocidad de rotación de las plantas.
“Tenemos muchas cartas de intención de productores internacionales interesados en nuestro sistema. Queremos ofrecerles una solución que acelere el crecimiento de las plantas, lo que se traduce en mayor capacidad productiva y un impacto significativo en el rendimiento económico”, concluye Sobrino.
Sylvarum representa un avance significativo en el campo de la agricultura de precisión y promete revolucionar el cultivo de plantas a través de la combinación de hidroponia y electroestimulación.